Desde el momento en que Liana arribó a El Dotado, Felipe Méndez le demostró que no era bienvenida. Para él sólo era una oportunista que había engañado a su tía para apoderarse de su propiedad. Sin embargo, ella no sabía nada al respecto y, en cuanto a oportunismo, la acusación le quedaba mejor a él. De todas formas, la joven estaba dispuesta a reclamar su herencia, aunque tuviera que luchar contra el arrogante Felipe.
2 comentarios
Hola me encanta tu blog por favor no privatizes Como lo estan haciendo algunos graciass !!!!
Me encanta este blog, mucho exito para todos los que colaboran en el funcionamiento del mismo.
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