Georgia Beaufort se llevó el susto de su vida al enterarse de que Sam Williams, su nuevo jefe, había dejado a su hijastro Dev Tolliver al cuidado de su propiedad ¡y de que eso incluía vigilar a la nueva paisajista!
Georgia tenía un secreto. En realidad, no era paisajista. Estaba allí por una razón muy diferente y lo último que debía hacer era enamorarse de Dev. Sabía que cuando le revelara su engaño, no querría volverla a ver, pero en lugar de eso ¡le pidió que se casara con él!
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